El concilio Vaticano II y su significado para la Iglesia ortodoxa rusa.

Por: Tipo de material: TextoTextoTema(s): En: Vol.6, núm.268, (1996) Pgs. 167-180Resumen: El concilio Vaticano II constituye un momento crucial y decisivo en la historia del mundo cristiano. Cuando el 11 de octubre de 1962 el papa Juan XXIII inauguró la primera sesión del concilio, se trataba de un concilio convo-cado para la renovación (aggiornamento) de la Iglesia católica; pero, cuando el 8 de diciembre de 1965 el papa Pablo VI clausuró la última (cuarta) sesión del concilio, éste se había convertido ya en "un concilio de grandes esperanzas" para todo el mundo cristiano.
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Traduccido del ruso al italiano por Adalberto Mainardi y del italiano al español por José Pedro Tosaus Abadía *** El autor: es protopresbítero y profesor bielorruso, nació en 1916. Estudió en el Seminario de Vilnius (1928-1936) y en la Facultad de Teología de la Universidad de Varsovia (1936-1939). En septiembre de 1943 recibe la ordenación, y pasa a ser rector y docente de Historia de la Iglesia en el Seminario de Minsk. De 1954 a 1962 es profesor de Historia de la Iglesia antigua en el Seminario de San Petersbúrgo. Representante de la Iglesia ortodoxa rusa en el CEI desde 1969, fue además observador en el concilio ecuménico Vaticano II y, hasta 1972, vicedirector de Fe y Constitución en Ginebra. De 1972 a 1995 enseñó Bizantinología y posteriormente Historia de las Iglesias occidentales en la Academia Teológica de Moscú, y actualmente es consultor del Departamento para las Relaciones Exteriores del Patriarcado de Moscú. Es doctor en Teología.

El concilio Vaticano II constituye un momento crucial y decisivo en la historia del mundo cristiano. Cuando el 11 de octubre de 1962 el papa Juan XXIII inauguró la primera sesión del concilio, se trataba de un concilio convo-cado para la renovación (aggiornamento) de la Iglesia católica; pero, cuando el 8 de diciembre de 1965 el papa Pablo VI clausuró la última (cuarta) sesión del concilio, éste se había convertido ya en "un concilio de grandes esperanzas" para todo el mundo cristiano.

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